miércoles, 1 de julio de 2009

Quiza ya no me quede nada y no pueda seguir dandote mas. Se siente el vacio. Por la noche lo siento en mi piel. Y me dan ganas de correr, muchas ganas de correr y de decirte algunas cosas al oido. No quiero ser lo que te faltaba, no quiero tener que esforzarme tanto por llegar cuando simplemente deseo darte lo que quiero.

1 comentario:

La Caperucita que se enamoró del lobo. dijo...

Pues si no quieres, no lo hagas, no dejes hacerlo.

un beso :*